Hablando de este San Isidro 2023, hay que destacar la labor de Alejandro Talavante. El extremeño pasó por Madrid con el lastre de lo vivido en el último festejo de la temporada en Las Ventas, solventando la papeleta con la grata sorpresa de una nueva y vivaracha actitud. Un compromiso propio para volver a enamorar la plaza que tantas tardes de gloria le ha dado.Â
No llegó el triunfo, pero los olés volvieron a resonar con fuerza en los tendidos. Unos ecos que se magnificaron con un excelso comienzo de faena, rodillas en tierra, que terminó por romper al respetable. No todo fue esa tanda, también con el capote y las diferentes lidias, han evocado el recuerdo del mejor Talavante de antes de su breve retirada.
Incluso, el rostro del torero, manifestó la ilusión y el compromiso con el que afrontaba estos compromisos en feria. Una serie de tardes muy criticadas en la presentación de la feria, como consecuencia de aquella actuación comprometida en la que se negó a terminar de pasaportar al animal.
Más allá de los premios y los trofeos, el paso de Talavante por este San Isidro 2023 ha dejado patente la recuperación de este torero. Un último paso que ha venido a refrendar lo que se está mostrando a lo largo de la presente temporada. Recuperada en parte la regularidad, la ilusión, el compromiso y la entrega están siendo innegociables para un matador de toros único en el escalafón.