Por Aitor de Vian (Tendido 5)
Raúl MartÃn Burgos es un experimentado rejoneador con una capacidad diferente de entender el rejoneo y es que este gran jinete destaca en el ruedo por su elegancia, su intención de buscar siempre la pureza más absoluta e introducir ciertos matices de espectacularidad. Tras un duro 2020 azotado por una pandemia mundial, el caballero madrileño ha decidido hacer un parón, de manera final o temporal. Es por ello que queremos saber qué es lo que piensa desde el otro lado de la barrera.
¿Cómo te encuentras actualmente?
- Bueno pues me encuentro muy tranquilo, es una sensación un poquito extraña y estoy disfrutando de muchas cosas de las que no disfrutaba cuando estaba en temporada. Sigo montando a caballo que es lo que me gusta y estoy muy contento la verdad.
¿Cuál ha sido la causa de tu retirada?
- Bueno la causa de mi retirada es algo muy meditado que llevaba ya mucho tiempo pensando, llevo mucho tiempo toreando, desde los 16 años, las circunstancias del paÃs y del toreo no son las mejores, además de diferentes circunstancias personales… Son un cúmulo de circunstancias que me han hecho decidir retirarme, pero sigo ligado a los caballos aunque no sea para el rejoneo.
¿Ha sido un adiós o un hasta luego?
- De momento es un adiós, pero no descarto el dÃa de mañana retomar mi carrera o torear en algún festival que me ilusione o me apetezca. Hasta el dÃa de hoy no entra en mis planes torear, tengo otros proyectos y otras ilusiones por ahora.
¿Mantienes la misma cuadra?
- No, no me es ni viable ni factible seguir manteniéndola, pero sà que me voy a quedar con varios caballos que me apetecen y me ilusionan los cuales no voy a vender por nada del mundo. Mi intención es torear vacas en casa y matar el gusanillo de vez en cuando, es por ello que no me voy a desprender de todos mis caballos, pero si de parte de ellos.
¿Es necesario parar para descansar después de tantos años?
- SÃ, en mi caso era muy necesario, llevo 26 años consecutivos toreando, el cuerpo ya me pedÃa parar para disfrutar de mi familia y de muchas cosas a las que no podÃa dedicar tiempo estando activo.
¿En qué momento crees que se encuentra el rejoneo?
- Profesionalmente se encuentra en un momento extraordinario, hay un plantel de rejoneadores buenÃsimos tanto las figuras como las promesas que vienen apuntando muy alto. Pero en el tema de lo que conlleva al sector cada vez está peor visto y con un futuro un poco incierto. Profesionalmente estamos muy bien, pero quizá falta abrir un poco más los carteles para dar cabida a rejoneadores jóvenes en carteles con figuras.
¿Hay rivalidad en el rejoneo?
- SÃ, claro que hay, cuando pisas el ruedo no hay amigos, siempre vas a estar mejor que el otro, aunque sà que es verdad que el rejoneo está un poco dividido. DeberÃan volver a torear juntos Pablo Hermoso de Mendoza y Diego Ventura, porque ya llenaron plazas cuando lo hacÃan y ahora podrÃa ser un gran aliciente para volver a generar afición e ilusión por el rejoneo.
¿Crees que hay justicia dentro del rejoneo?
- Creo que no demasiada, muchas veces lo que te ganas en la plaza no es correspondido con otras corridas, ahà creo que eso deberÃa ser más justo. Yo creo que lo que se haga en la plaza para bien o para mal deberÃa servirte más de lo que hoy en dÃa sirve. Además creo que los triunfos en plazas importantes deben tener más trascendencia, antiguamente cortabas una oreja en Madrid y te valÃa para dar la vuelta a España, ahora triunfas y tan sólo te vale para volver al año siguiente.
¿Torear a diario desgasta psicológicamente?
- Mucho, tanto fÃsicamente como psicológicamente, hay que tener en cuenta que estamos sometidos a mucho riesgo y estrés, y eso desgasta mucho. Sà que es cierto que cuando toreas a diario el cuerpo está habituado a ello, pero sigue desgastando claro.
¿Cómo definirÃas en una frase la situación actual de la tauromaquia?
- Complicada, hay que apoyarla mucho, defenderla bastante y enseñarla más.
Esto ha sido todo, la confesión de un rejoneador que ha entregado todo al rejoneo y que estoy seguro de que pronto entregará un poco más.
Aitor Vian