Alberto López Simón volvió a la plaza de toros de Las Ventas el pasado dÃa 30 de septiembre para despedirse de El Juli. Lo hizo en una faceta diferente a la que realizaba antes de anunciar su retirada de los ruedos, pero no quiso perderse desde los tendidos el adiós de Julián. Sentado sobre la piedra disfrutó del triunfo del torero de San Blas por última vez en la capital del toro.
El joven torero sabe de primera mano las complicaciones de la profesión y el respeto que profesa a Julián. Han compartido juntos catorce tardes a lo largo y ancho de la geografÃa taurina:. Desde Nimes, Valencia o Albacete, pasando por la plaza de toros de Las Ventas y llegando hasta Pamplona o Bilbao. Una serie de tardes que vinieron precedidas por los triunfos de López Simón en Madrid, que le auparon a lo alto del escalafón.
López Simón anunció su retirada de los ruedos el pasado dÃa 24 de enero. A través de un comunicado remitido a los medios y a la afición, el diestro comunicaba que colgaba el chispeante:. «Escribo esta carta para transmitir a los pocos o muchos aficionados que les pueda interesar mi decisión de retirarme (…) Por eso digo adiós, porque no puedo defraudarme a mi mismo, pero sobre todo no puedo defraudar al toro, que me ha entregado su vida y que me lo ha dado todo«.
López Simón no quiso perderse la retirada de El Juli en Madrid. El último adiós, antes de Sevilla, en la plaza que le correspondió por nacimiento. Un coso con el que Julián tuvo sus más y sus menos y para la que siempre ha mantenido su anhelo de conquista.