Álvaro de la Calle fue uno de los grandes protagonistas del festival celebrado en la localidad salmantina de Sancti Spiritus. El torero cortó tres orejas dejando un tarde de profundo toreo y personalidad.
Una oreja de ley arrancó al primero de su lote de la ganadería de El Sierro, con una faena templada y de gusto propio que rubricó con los aceros. Frente al segundo de su lote, de la misma ganadería logró los dos apéndices a base de esfuerzo, tesón y buenas maneras. El manejo de la tizona rubricó el conjunto de una importante tarde.
Junto a él, alternaron Esaú Fernández y el novillero Cristiano Torres, cortando tres orejas y una oreja respectivamente.
