García Navarrete evoluciona favorablemente de las cornadas recibidas ayer en Las Ventas. «El novillo ya llevaba rato queriéndole echar mano, se frenaba y le esperaba. Cuando se tiró a matar no le dio tiempo a nada y fue muy certero en sus derrotes» así hablaba Antonio Campuzano sobre el novillo del percance.
El joven novillero ha pasado buena noche aunque con los dolores típicos de una cornada de estas características. El novillero entró consciente a la enfermería explicando al equipo médico en que zonas sentía dolor. La cornada que más le preocupaba y dolía era la del muslo, que evoluciona favorablemente a pesar de haber drenado sangre toda la noche.
Por otra parte, la cornada del cuello y la boca, evoluciona favorablemente y, según D.Máximo García Padrós, no quedarán secuelas a pesar de la gravedad del percance. ‘Tenemos que dar gracias de que aunque haya pinchado la lengua y el paladar no lo ha roto, por lo que todo será menos complejo’
Ahora lo que preocupa es la fractura de clavícula que es la que más puede alargar los plazos de recuperación. En las próximas horas se reunirá el equipo de galenos para valorar una posible intervención quirúrgica.
