Mérida y José Tomás se han convertido en el sueño que no ha podido ser este verano. El Periódico de Extremadura ha publicado que el torero no actuará en septiembre, cerrando uno de los capítulos que más expectación habían levantado este curso.
Según el citado medio, lo que ha fallado ha sido la negociación económica. Ambas partes han mantenido fijas sus posturas, lo que ha dado al traste con la presencia del de Galapagar en este enclave pacense para la tauromaquia. Algo que ya se empezó a intuir al no haber presentación, ni anuncio para el cartel.
La postura entre empresa y entorno del torero llevaban enquistadas varias semanas. Unas negociaciones que se habían estancado y que han dilatado en el tiempo la posibilidad de anunciar el cartel con el nombre de mito madrileño. Además, la demora ha provocado que la empresa no tenga tiempo de reacción para confeccionar una nueva cita de calidad y alicientes para el coso.
José Tomás y Mérida no serán este verano. Los honorarios del madrileño han puesto fin al que podría ser el acontecimiento del verano, una cita que pararía el orbe taurino, como ya sucedió el pasado curso. Un cartel que reivindicaría la fuerza y el pulmón de la tauromaquia… pero que ya no será posible.
La contratación de José Tomás para Mérida este 2023 ha dado sus últimos estertores. Según ha publicado el Periódico de Extremadura, la localidad pacense no tendrá toros este mes de septiembre. Una noticia que pone fin a los rumores reales que había entorno a la contratación del torero de Galapagar.
Según las escasas informaciones que hay al respecto, no se habría alcanzado acuerdo entre ambas partes, lo que ha propiciado finalmente el no del torero. Una falta de acuerdo que habría tenido lugar en el aspecto económico, dónde las negociaciones se habían estancado en las últimas semanas.
El retraso en la confección de la cartelería a la espera de José Tomás, ha sido el desencadenante de que Mérida se haya quedado sin toros. Todo parece indicar que no habrá festejos mayores y tan sólo se organizará una capea popular en tan señaladas fechas.
José Tomás y Mérida no se verán las caras este 2023. Una noticia que, desde su filtración ha ya muchos meses, ha traído el interés de los aficionados. Muchos esperaban durante este mes de agosto el anuncio oficial para tratar de lograr un boleto para ver a un mito de la tauromaquia. Hay que recordar que los dos festejos del diestro el pasado año llenaron hasta los topes Alicante y Jaén.
Los rumores sobre el regreso de José Tomás se han vuelto a disparar. Todo aquello que rodeo al Príncipe de Galapagar es un polvorín que explota, cada vez que se produce un nuevo gesto; propio o de su entorno. Una situación recurrente cada temporada, como si del culebrón de Mbappé con el Real Madrid se tratase.
El mito taurino vuelve a estar en boca de todos. Un hecho que viene precedido por una imagen muy discreta que se dio en la plaza de toros de Santander. José María Garzón, gerente de la plaza y empresario de Lances de Futuro, compartió burladero con Salvador Boix, apoderado de José Tomás.
La expectación por el torero madrileño es desbordante, lo que además se multiplica por su perfil alejado de los medios y su corto bagaje por temporada. El soufflé que se generó con Mérida parece haberse diluido con el paso del tiempo… y aunque quedan cenizas que de vez en cuando reviven, el incendió que provocó para estar extinto.
Ahora, tras las imágenes de Santander, todas las esperanzas para el regreso de José Tomás se centran en José María Garzón. Empresario de varios importantes cosos de la geografía taurina, podría ser que existiese algún hueco en los abonos que aún faltan por conocerse. Más sencillo sería, siguiendo la línea marcada por el torero en los últimos años, un festejo fuera de abono…
El Cierre Digital ha dejado el adelanto de lo que puede ser una de las noticias de la temporada. Según la avanzado por el citado medio, José Tomás podría tener firmado en Mérida el primer contrato de esta temporada 2023. Una cita que, de confirmarse, daría un importante impulso a la actividad taurina en esta ciudad que sigue ganando pulso gracias a la gestión de José Luis Perera.
Desde su último festejo en la plaza de toros de Alicante, previo paso por Jaén el pasado verano, poco se ha vuelto a saber del «Príncipe de Galapagar». Fiel a su concepto, se mantiene alejado de los focos mediáticos y la poca información que ha trascendido desde entonces, es que no ha dejado de entrenar en el campo.
La noticia ha saltado a la luz por la petición de plasma por parte del equipo del torero a los médicos de la plaza de Mérida. El diestro, muy exigente con los equipos médicos tras su gravísima cornada en Aguascalientes, siempre requiere unidades de plasma en las enfermerías; además de todo el equipamiento necesario para que el quirófano funcione de la manera más correcta.
La fecha en la que José Tomás se anunciaría en Mérida, estaría prevista para finales del mes de agosto o principios de septiembre. Una cita, que terminaría de impulsar la tauromaquia en este coso que ya está acogiendo eventos de gran embergadura, como la encerrona de Diego Ventura el pasado curso, que colgó el lleno de No hay billetes.
El empresario José Luis Pereda y el rejoneador Diego Ventura han llegado a un acuerdo para que este actúe en solitario en la próxima Feria de Mérida ante seis toros de diferentes encastes. Este será uno de los contenidos estrella en la primera temporada de Pereda al frente del coso emeritense, uniendo a la perfección la intención del empresario de devolver el prestigio a este coso y la voluntad de Diego Ventura de hacer grandes gestas y participar en la revitalización de plazas de toros.
La importante gesta de Diego Ventura tendrá lugar el 3 de septiembre con seis toros de otras tantas ganaderías y encastes diferentes: tres de ellas españolas y otras tres portuguesas. Y entre los elegidos habrá hierros de los considerados duros, aún por confirmar, pero en la línea de los que Ventura viene incluyendo en sus carteles cada vez más frecuentemente.
José Luis Pereda, que es propietario y empresario de este coso, agradece la buena disposición del rejoneador, que le ha permitido cumplir su deseo de “ofrecer a la afición emeritense un espectáculo único que será uno de los grandes acontecimientos taurinos del año en Extremadura”, según sus propias palabras.
Por su parte, Diego Ventura explica: «Es un reto que me apetece mucho. Este es un año de apuesta fuerte, muy fuerte, por mi parte, en todos los sentidos y quiero que no le falte de nada por el bien del rejoneo en un momento en el que lo necesita y mucho. Y en el que los públicos responden a este tipo de propuestas, como se demuestra en las entradas que están registrando las plazas donde toreo. No podía faltar una corrida en solitario y entiendo que Mérida es un sitio ideal para hacerla”.
El rejoneador elogió también la iniciativa de José Luis Pereda: “Ha hecho una apuesta importante por recuperar una plaza que ha sido tan significativa, tan bonita y de tan buen ambiente siempre y me siento identificado con quien, como él, da estos pasos adelante. Que recuperemos Mérida, como otras plazas de toros similares a ella y que hayan estado algo olvidadas en los últimos años, requiere del compromiso de todos, por supuesto, también de los toreros”, explica Diego Ventura.
En cuanto al planteamiento de la corrida, Ventura adelanta lo siguiente: “Habrá variedad ganadera y de encastes, grupos de forcados y lo mejor de mi cuadra. Pretendo plasmar la mejor demostración del toreo a caballo de este tiempo y de tiempos precedentes en los que bebí y donde me inspiré. Habrá, por tanto, variedad, espectáculo, emoción y toreo. Toreo total”.
Esta será la sexta corrida en solitario que afronte Diego Ventura en su trayectoria. Antes lo hizo en Ronda en 2008, en Huelva en 2012, en Sevilla en 2013 y en Espartinas y Madrid, ambas, en 2018, para conmemorar el vigésimo aniversario de su alternativa.
El empresario y ganadero José Luis Pereda López amplía sus horizontes taurinos con la adquisición de la Plaza de Toros de Mérida, un acuerdo que ha formalizado con el anterior propietario y que ya es efectivo, habiendo tomado posesión del coso.
De este modo, José Luis Pereda sigue los pasos de su padre, el empresario del mismo nombre recientemente fallecido que adquirió e hizo resurgir la plaza de la Merced en Hueva. Ese mismo propósito tiene Pereda para el coso del Cerro de San Albín, como es conocida la plaza de toros emeritense, para el que tiene planes que conseguirán realzar su feria taurina y potenciar económicamente la ciudad de Mérida. Para ello, revitalizará el mercado gastronómico que ocupa toda la planta baja del coso, así como el museo taurino con la intención de convertir este edicio en punto de encuentro y referencia cultural para los emeritenses.
Como precedente de esta nueva etapa está el magnífico trabajo realizado por este joven empresario y ganadero la pasada temporada en las plazas de toros de Huelva y Almodóvar del Campo (Ciudad Real), donde programó ferias que fueron todo un éxito en un año todavía complicado por la pandemia.
Pereda quiere agradecer al anterior propietario, Vicente Elices Marcos, la confianza depositada para continuar con un proyecto que él inició en 2014.
La Plaza de Toros de Mérida comenzó a construirse en 1902 por la Sociedad Taurina Extremadura y fue inaugurada el 5 de julio de 1914 por Tomás Alarcón “Mazzantinito”, Rodolfo Gaona y Franciso Posada con toros de la Viuda de Concha y Sierra.
La empresa taurina Toros Yucatán ha presentado un cartel de máxima categoría por el 93 aniversario de la Monumental de Mérida. La corrida está prevista para el próximo 30 de enero en mano a mano entre Antonio Ferrera y Joselito Adame, que se medirán a los toros de la ganadería de Torreón de Cañas.
Antonio Ferrera es uno de los toreros españoles más querido y admirado en el continente americano siendo un habitual en la cartelería azteca. Su última actuación ha sido en la feria de Cali con dos tardes sobre el cartel, abandonando en volandas el coso en la primera de sus actuaciones.
Joselito Adame por su parte, continúa siendo la máxima figura de la tauromaquia en su país y cuenta con un cartel exquisito a lo largo de la geografía nacional mexicana.
«El Juli» ha participado en el festejo de Mérida en el que ha dejado dos solventes actuaciones, en las que ha saludado sendas ovaciones. El madrileño ha toreado con gusto en ambas ocasiones, pero el juego de los animales han condicionado su actuación.
Sin embargo, su actuación en la suerte suprema ha despertado grandes críticas al tirarse a matar con el ya bautizado como «Julipie». Una parte del público ha recriminado al espada su actuación, mientras que en redes los comentarios no se han hecho esperar.
Miguel Ángel Perera ha sido condenado por fraude fiscal y deberá pagar una multa de 1,21 millones de euros según publica el diario «Hoy». El torero extremeño mantenía una causa abierta desde el pasado año, cuando tuvo que abonar también 2,59 millones de euros.
Los hechos se remontan a las temporadas 2008 y 2009, cuando el torero presentó unas declaraciones del IRPF fraudulentas. Esto se traduce en que en el primer año señalado, Perera no contabilizó los 594.500€ pagados en efectivo por empresarios del sector. La siguiente temporada, la cifra se elevó hasta superar el millón de euros; en concreto 1.185.327€. A todo ello, hay que sumar otros gastos no deducibles que elevaron la cifra final hasta los 1,63 millones de euros defraudados.
La sentencia emitida por el juzgado de lo penal número 1 de Mérida, dictaba también 22 meses de cárcel. Estos han podido ser eludidos por el espada al tratarse del primer delito fiscal, que la pena no superaba los dos años de cárcel y a que el torero ha podido hacer frente a la responsabilidad civil. Los tres delitos por los que estaba imputado Miguel Ángel Perera, se descomponían del siguiente modo:
o IRPF 2008: Por este delito se pedían ocho meses de prisión y una multa por valor de 448.000€
o IRPF 2009: 679.000€ de multa y de nuevo, 8 meses de prisión.
o IVA 2009: Por este último delito se le condenaba a una multa de 86.000€ y seis meses de prisión.
El total de las tres condenas suma una cuantía de 1,21 millones de multa y 22 meses de prisión, además de deber pagar los costes íntegros del procedimiento.
Una vez finalizado el proceso, el torero elude la cárcel por los motivos ya expuestos y sólo deberá abonar la cantidad fijada en concepto de multa. Dinero al que el espada extremeño puede hacer frente y por lo que acabará todo, una vez aboné el importe.
Hace siete años, un 1 de septiembre de 2013, Alejandro Talavante se encontraba toreando en la plaza de toros de Mérida como único espada. Durante la lidia a un astado de Zalduendo se arrancó cantando, entre el desconcierto del público y de los propios comentaristas, que buscaban en el tendido la voz que rompía entre los olés.
Remitimos el vídeo para que puedan escuchar y ver un momento tan peculiar como este: