En su intervención, el Dr. David AntolÃn, jefe del servicio de oftalmologÃa del Hospital madrileño La Milagrosa, y uno de los cirujanos oftalmológicos más destacados de nuestro paÃs, ha querido reseñar: «Vamos a hacer un breve comentario acerca del curso clÃnico de las lesiones sufridas por el matador de toros Javier Cortés, el pasado 15 de septiembre y el curso clÃnico que ha seguido. Hay que reseñar que Javier ya tenÃa un ojo antes de la cogida, en el cual habÃa sufrido unas cuantas patologÃas previas que hacÃan que Javier estuviera ya toreando con una merma.El dÃa 15 de septiembre sufrió un traumatismo que ha podido parecer menos de lo qué es y quizás algunas fotos han permitido verlo asà en parte… pero sà hubiera sido un par de centÃmetros más allá, a lo mejor, no estarÃamos hablando de Javier en presente, sino que se hubiera podido quedar en la plaza. Es una cosa que es importante saber y reseñar porque a tres centÃmetros de donde fue la cogida hay estructuras vitales que no hubieran podido tener solución.
Tras una valoración ,muy meritoria por el equipo de la plaza de toros de Las Ventas, Javier fue derivado al Hospital del Gregorio Marañón , en el cual sufrió una primera reconstrucción llevada a cabo de manera también muy meritoria por el equipo de médicos del Hospital Gregorio marañón y pasó a ser controlado clÃnicamente durante las siguientes semanas, en las cuales sufrió un aumento de tensión en el ojo qué ha podido ser controlado satisfactoriamente y hasta ahora hemos tenido que re intervenir una vez más porque ha surgido una complicación, que por un lado era moderadamente previsible porque un problema con una operación anterior y ha habido que lavar, limpiar y prepara unas cosas para poder acceder a una reconstrucción en el futuro; pero de momento la situación clÃnica de Javier es que de momento es un ojo que no ve, necesitarÃamos realizar una re construcción posterior para colocar una lente intraocular y ver hasta qué punto podemos recuperar visión. Hasta ahora la estructura del globo está conservada, pero es un ojo sin visión».
Imagen: BARTOLOMÉ BERNAL, cedidas por Burladero.Tv