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Todas las crónicas de los festejos taurinos del mundo

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Por Kike Avonce

Cayó el indulto número 34 en el coso de los insurgentes ante media entrada con ganas de ver la dispuesta del premio a la Forca de Oro. Se lidiaron toros de La Estancia buenos en conjunto destacando el quinto que fue indultado por Emiliano Gamero. 

Abrió plaza el español Andy Cartagena que pudo haber salido a hombros si hubiera matado al primer intento a sus dos toros, luego de cuajar faenas clásicas, toreras, en las que combinó a la perfección el espectáculo y el toreo, siendo la primera con el toro más hecho de la corrida, que tuvo nobleza, y otra de mayor redondez ante el cuarto, que fue bravo.

Emiliano Gamero se topó con el mejor lote de la tarde, dotado de dinamismo y una conexión bárbara con la gente, no obstante que las piruetas que ejecutó no tuvieron ceñimiento, y volvió a entusiasmar al público con “Júpiter” antes de clavar un rejón entero que no hizo doblar al toro, descabello y se le fue la oportunidad de cortar una oreja. Recibió a porta gayola a “Recuerdos”, desde su salida salió con mucho son y transmisión, el toro empezaba a ganarse su indulto con la bravura  que mostró en todo momento de la lidia. Fue una fuerte petición de indulto, terminando siendo accedido por el juez.

Fauro Aloi se topó con un lote con le ayudó mucho a mostrar, su primero un toro de comportamiento reservado cuando salió de toriles, poco a poco Fauro con habilidad y una serie de recursos termino desengañando las embestidas del toro. Con el sexto acabó haciendo otra faena de mucho toreo de frente, en la que clavó en distintos terrenos con seguridad y arrojo. Y a la hora de matar el toro tardo en doblarse, con eso se le fue una oreja que había ganado a pulso.

19/03/2024 0 comentarios
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Por Kike Avonce

Se celebró la tradicional corrida de feria en Apizaco, vimos a los tres jóvenes que vienen despuntando, que ya se han visto las caras en otras ocasiones, donde ha salido por la puerta grande Isaac Fonseca.

Salió como primer espada Leo Valadez,  que ha venido haciendo bien las cosas y teniendo triunfos importantes como la semana pasada en León, no tuvo tanta suerte el día de hoy ante un lote muy deslucido. El primero de la tarde desde su salida hasta el final,  fue un toro muy incierto que no ayudo mucho al hidrocálido. El segundo de su lote tuvo pasajes buenos por el pitón derecho pero pronto se apagó para escuchar palmas.

El queretano Diego San Román salió a imponerse después de un rotundo triunfo en la México la semana pasada. Su primero que fue protestado desde la salida, pronto Diego empezó con sus lanzas y esos chiflidos fueron cambiados por oles, en la muleta el animal humilló por ambos lados y terminó pinchando. Su segundo un gran toro que desde su salida mostró clase y fijeza, durante toda la faena siendo en la muleta un burel que repetía con mucha bravura y por ambos lados iba muy humillado, lamentablemente pinchó amabas veces para recibir aplausos y vuelta al ruedo. Mientras que el toro recibió aplausos en el arrastre.

Isaac Fonseca también salió por todas en este festejo, con su primero un toro que se le quedaba y faltante de transmisión, que dejó buenos pasajes por el pitón izquierdo a base de estarlo trabajando, sufrió un susto casi al finalizar la faena, pasó a la enfermería finalizando la faena, tendremos que esperar su parte médico. Con su último al que recibió a porta gayola y con dos faroles de rodillas, el toro demostró mucha clase y transmisión por ambos pitones que fue aprovechado y terminó pinchando la faena para después dejarla en buen sitio, así cortar la única oreja del festejo.

05/03/2024 0 comentarios
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Por: Kike Avonce

Una de las corridas más completas para el aficionado turista fue la corrida del día de ayer, cartel de tres toreros que en ningún momento se dejaron y pelearon las palmas, por el ámbito ganadero los seis buriles de la dehesa de Pozo Hondo mostraron bravura, calidad y clase.

Emilio de Justo confirmaba su alternativa en el coso de los insurgentes, hizo una primera faena muy torera por su estructura, su seguridad, y los excelentes momentos que le regaló a la gente, toreó muy bien por ambos pitones, más todavía por el izquierdo, en una obra de buen acabado ante un toro noble con el que hubo acoplamiento y compás. A la hora de perfilarse para entrar a matar,  hecho que derivó en un lamentable pinchazo que le arrebató la oreja que ya tenía en la espuerta.

Con su segundo toro el extremeño se vio un tanto crispado y quizá aupado por ver cómo el triunfo se le escapaba de las manos, en una tarde donde sus compañeros de cartel ya se le habían ido por delante. Sin embargo, su toreo gustó, y también su personalidad, pues es un torero cuyo estilo comulga bien con lo que agrada a un sector de esta plaza que hoy vivió la belleza del trapío, la emoción de la bravura, y la magia del toreo. Cuando sale el toro encastado. El que genera admiración y respeto, el que pone a todo mundo en su lugar.

José Mauricio brindo a todo público, inició con elegantes pases rodilla en tierra. Le echó mucha voluntad a un toro que se tornó un tanto complicado que en ocasiones se frenaba dejando él los pies muy fijos. Espectacular volapié para que el toro rodara sin puntilla. Cortó una merecida oreja con petición de otra. Ante el cuarto, Mauricio pegó un ceñido quite por gaoneras. Con la muleta se puso en terrenos comprometidos a un toro que se quedaba corto. Pinchazo hondo suficiente.

Diego San Román fue un torbellino de arrebatado valor, dueño de una intensidad que asunta, porque se pone en ese sitio donde están las Puertas Grandes, y hoy, con un poco de suerte en el sexto, terminó por conquistar la primera en esta plaza, que gozó y sufrió con su toreo de cercanías, firmeza de plantas y un olé que a la gente le salía de las entrañas.

Mayor mérito tuvo su trasteo al tercero, un toro bajo de agujas y corto de manos que no regalaba una embestida. Si a ello sumamos el viento tan molesto que le hacía flamear la muleta, no se veía por dónde el queretano le iba a sacar provecho. Pero Diego sabe muy bien lo que anhela y hacia dónde se dirige, sabe que la corrida del domingo siguiente se va a volver a encontar a Valadez y a Fonseca con los que tiene asuntos pendientes.

27/02/2024 0 comentarios
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Por Kike Avonce

Mientras Alejandro Talavante volvía a sonreír en la Plaza México después de mucho tiempo, Héctor Gutiérrez derramaba su sangre en un ruedo al que venía a reivindicarse, consciente de que un triunfo en este escenario era, en este preciso momento, un tanque de oxígeno para su carrera, que apenas hace tres meses quedó a la deriva tras el rompimiento con la empresa Corona + Corona, que tanto había apostado por su futuro.

Y como los toreros son los mejores –o peores, según sea el caso– inversores de sus acciones en la «Bolsa Taurina», al final se la jugó en aras de un ideal, en el que pudo mostrar su carácter y la calidad de su toreo.

Ya desde los lances de recibo al torear a la verónica, pasando por el estoico quite por verónicas, Héctor mostró a que venía hoy a La México. Y cuando estaba toreando con mucha entrega al tercer toro de la corrida, vino el navajazo certero, dramático, que le partió el muslo derecho. A pesar de sus esfuerzos por zafarse de las asistencias, tuvo que tragarse la hiel de una cornada que le dolerá más en el alma que en la pierna, sabedor de que hoy tenía que pasar algo más que eso. No pudo convencer a las asistencias de que lo dejaran matar al toro, y se lo llevaron, y consigo sus ilusiones, pero nunca su encastada reciedumbre de torero.

Pero en esos pocos pasajes en los que estuvo delante del toro de Villa Carmela, sí que pudo manifestar su valía, su pundonor, y un toreo de muchos quilates que habrá tiempo de que brillen de la mejor manera posible.

Con el estupor que siempre causa una cornada de estas, Alejandro tuvo que dar muerte al toro que hirió a Héctor, y no se dejó influenciar de esa imagen tan dramática, sino que volvió a estar a la altura de las circunstancias, y muy por encima del segundo de su lote, con el que se inventó una faena interesante, en distintos terrenos, y que de haber terminado de mejor manera con la espada, hubiese cortado la segunda oreja de la tarde para salir a hombros.

Porque la primera se le arrancó al toro que abrió plaza a base de cabeza clara y corazón, ante un toro que no fue fácil, porque no se entregaba en la embestida y había que hacerle todo por nota. Y así se lo hizo el extremeño, con la naturalidad y experiencia de la madurez de una gran figura del toreo, en medio de la expectación y el gusto del público por verlo torear de menos a más, hasta llevar la faena a una cuota importante de emoción y cortarle la oreja al toro después de una tocada deletreada.

El Payo vino mentalizado a hacer las cosas bien, con sobriedad y torería, pero, lamentablemente, le tocaron tres toros con escasas posibilidades de lucimiento por su falta de casta. El queretano sólo pudo bosquejar detalles sueltos de buen toreo, que el público reconoció y valoró, pero sin llegar a romper por esa falta de chispa de los ejemplares que lidió. Una pena.

La gente esperaba más de esta corrida de Villa Carmela, y del resultado final del festejo por lo original y bien equilibrado del cartel. Pero hoy, los toros quedaron a deber, de una divisa acreditada que en los últimos años había estado embistiendo de categoría. Por eso están difícil esto de criar el toro bravo y, más que nada, conseguir la definición genético de una ganadería.

19/02/2024 0 comentarios
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