Partido de Resina, los antiguos toros guapos de Pablo Romero, se caracterizan por mantener viva esa llama propia de la ganaderÃa, esa esencia que les hace seguir siendo únicos. Toros cárdenos, con proporciones propias del encaste y con unas hechuras dignas de admiración. ¡Una pintura!
En esta ocasión, la propia ganaderÃa a través de redes sociales ha querido compartir un instante llamativo: Durante el encajonamiento de uno de los animales, se comprobó que no entraba en el cajón por la amplitud de las astas, que golpeaban continuamente las láminas de metal.
Con algo de guasa, el hierro ha publicado el vÃdeo del momento, acompañándolo del siguiente texto: «Vamos a tener que agrandar los cajones…»