La pasada noche del 9 de marzo, Rafaelillo fue el gran protagonista del Club Taurino de Pamplona, dónde compartió una estupenda velada con la afición con motivo del 75 aniversario de esta institución.
A lo largo de un largo coloquio, el torero fue desgranando los planes de la temporada, sus ausencias y las combinaciones que están por venir, haciendo especial hincapié en Pamplona y Madrid; la primera porque se presupone su presencia y la segunda por su ausencia.
Un emotivo acto que concluyó el torero donando el terno con el que casi pierde la vida en la plaza de Pamplona. El terno, nazareno y oro, quedará en la ciudad para el recuerdo y el agradecimiento del torero, que ha querido destacar que sigue igual que cuando se lo quitaron en la enfermería.
