De cuándo despreciamos a la FTL y desconsideramos su labor en la tauromaquia

Es sorprendente escuchar día tras día comentarios negativos hacia la Fundación Toro de Lidia desde diferentes estamentos de la tauromaquia, incluyendo a la afición. Muchos se preguntan qué labor realizan, por qué no defienden la fiesta aquí y allá, el afeitado, el trapío… pero las victorias dan igual, o eso parece. 

La sentencia del tribunal Supremo que declara nula la exclusión de la tauromaquia del Bono Cultural es una victoria; una gran victoria. La Fundación Toro de Lidia ha ido construyendo a lo largo de los años un importante marco jurídico en torno a la fiesta de los toros que ha hecho posible combatir la maquinaria del estado y sacar una sentencia a favor en un tema en el que el gobierno había incidido negativamente para no incluir la tauromaquia en este bono. 

A esta gran victoria, se puede sumar el trabajo y la proyección que están llevando a cabo a través de los Circuitos de Novilladas. La FTL ha acogido una parte de la fiesta que estaba viendo como año a año se disminuían los festejos y se amenazaba el futuro del escalafón; y la ha relanzado, sacando adelanta importantes nombres como Isaac Fonseca, Sergio Rodríguez, Jorge Martínez, Marcos Linares, Diego García, Álvaro Burdiel… y un sinfín de nombres más… pero a muchos, también les parece mal. 

Podemos también añadir la Copa Chenel, la que ha revitalizado la carrera de muchos matadores que veían sus temporadas abocadas a esperar unas llamadas telefónicas que nunca llegaban. Pueden preguntarle a Francisco de Manuel sí el certamen vale para algo… pero no sólo a él, también a otros tantos matadores que aún no habiendo ganado, han visto sonar su teléfono después de caer eliminados. 

Podrían ponerse cientos más de ejemplos de labores que ha llevado a cabo la FTL, pero muchas veces no hay más ciego que el que no quiere ver. Mientras la Fundación Toro de Lidia aumenta de poquito en poquito su número de amigos, muchos colectivos animalistas aumentan en decenas de miles, aumentando su presión en los gobiernos y amenazando a la fiesta… Sí la FTL con tan pocos amigos puede tener la fuerza y la constancia actual ¿Qué se podría hacer con varias decenas más de amigos? Da qué pensar…