El nuevo Reglamento referente a los festejos populares está teniendo una escasa aceptación desde su publicación ayer en el portal de transparencia. A pesar de tratarse de un borrador inicial, numerosas asociaciones y aficionados están denunciando que no se han tenido en cuenta sus opiniones y que el nuevo texto, es tan restrictivo como peligroso para la tauromaquia.
Uno de los apartados que más se está analizando es el que hace referencia a la implantación de un geolocalizador para los encierros camperos o mixtos, en caso de que la res quede extraviada: «Los animales que participen en encierros camperos o mixtos deberán llevar un dispositivo electrónico de búsqueda para su localización sà quedasen extraviados«.
Una propuesta que ha encontrado tanto a detractores como partidarios. Por un lado se defiende el peligro que representa una res perdida; pero por otro, supone una nueva manipulación de la res, además de una medida que podrÃa seguir agigantando los costos a los ganaderos, dependiendo de sobre quién cayese la responsabilidad de dicho dispositivo.