Víctor García, más conocido como El Víctor es uno de los mejores subalternos del orbe taurino, y es que este banderillero calagurritano lleva mostrando al toreo día tras día ejemplos de humildad, sencillez, fidelidad y saber estar en cada corrida de toros. Ejemplo claro de todas las virtudes anteriormente señaladas es su relación con Diego Urdiales que va más allá del vínculo profesional, tanto que sin entender la carrera de El Víctor sería imposible entender la de Diego Urdiales y a la inversa. Actualmente se encuentra en un estado de forma envidiable dejando grandes pares en todas las ferias que pisa, dejando claro el momento en el que se encuentra, tal vez, el más álgido de su carrera.
¿Compensa tanto sacrificio para disfrutar de 10 o 15 capotazos en una tarde?
- El sacrificio forma parte de la vida si de verdad quieres conseguir algo. Siempre deseas mejorar y el entrenamiento diario te da la confianza necesaria para estar lo mejor posible cada día delante del toro. Es un sacrificio que merece la pena porque te aporta seguridad en la plaza. Un buen capotazo es la realización de uno mismo. Intento dar los menos posibles para dejarle todo lo que tenga que dar en la muleta.
¿El Víctor se retirará el día que Urdiales lo haga?
- No pienso constantemente en mi retirada pero sí que sería bonito irnos juntos de esta profesión. Desde niños, 11 y 12 años compartimos tentaderos, novilladas y corridas de toros. Son ya muchos años recorriendo caminos juntos. Sería una buena retirada junto a mi amigo y maestro.
¿Cómo ves la situación actual del toreo?
- Me encantaría que el toreo actual a nivel social estuviera considerado como uno de los bienes más preciados, pero por desgracia “algunos” se están encargando de que no sea así. Creo y espero que recuperemos esa fuerza y esa ilusión para mantenerlo vivo. El respeto hacia “algo” es lo que hace que siga hacia delante, pero desgraciadamente muchas personas lo han perdido del todo.
¿Cuáles han sido tus sensaciones esta temporada?
- Esta temporada me encuentro bien y por lo tanto las sensaciones son muy buenas. En banderillas me siento seguro de mí mismo y con la lidia intento conseguir esa realización que me hace sentir torero.
¿Qué significa Diego Urdiales para ti?
- Diego para mí es parte de mi familia. Compartimos muchos momentos juntos y eso hace que tengamos una complicidad especial.
¿Es difícil ser torero en el norte?
- Para mí, ser torero del norte no es una preocupación añadida. También es verdad que no se vive como en otros lugares de España pero tu mente te hace vivirlo para sentirlo en todos los lugares igual. El ejemplo claro lo tenemos en Diego. La calidad de su toreo se siente de igual forma en el norte que en el sur. Si lo tienes, te lo reconocen en todos los lugares.
¿Es duro el toreo?
- El torero es duro y a la vez maravilloso por naturaleza. Son sensaciones muy difíciles de explicar pero creo que una sin la otra no harían de esta profesión esa magia tan bonita.
¿Con qué sueñas por las noches?
- Por las noches sueño con hacer felices todos los días a mi mujer y a mi hija porque ellas también “sufren” la dureza y la grandeza de esta profesión. Estoy en un momento personal muy tranquilo aunque con la preocupación lógica de la temporada.
¿Quién es El Víctor?
- Soy una persona normal que disfruta con sus amigos degustando unos huevos fritos con jamón (ríe el hombre de plata). Me encanta hablar de toros con las personas mayores que saben de esta profesión, me gusta escucharlas porque aprendo mucho. También disfruto de mi familia todo lo que puedo. Como profesional taurino tengo afán de superación cada día. Entreno para ello, hay que procurar dar todo de uno mismo cada día en el ruedo y después de una buena ducha cuando te quitas el traje de luces, cambiar impresiones con mi familia taurina.
Aitor Vian
