Hubo un detalle que pasó totalmente desapercibido en el indulto de Juan Serrano «Finito de Córdoba»; un detalle que pasaba totalmente oculto a la vista de cualquiera pero que, sin embargo, sí llegó a ojos de quién debía llegar. Se trataba de un bordado en el la chaleco que vestía el matador de toros y que quedaba oculto tras la chaquetilla.
Entre los motivos florales bordados en negro azabache, se encontraba el nombre de su hija Lucía. Nadie se habría dado cuenta a no ser por una publicación en redes sociales de su propia hija, que mostraba el chaleco de Finito. Un detalle que quedará grabado en la memoria de su hija, no sólo por lo que significa a nivel personal , sino también porque el torero de Córdoba indultó a un animal con ese traje de luces.
