Un trago duro pasó Román en la lidia al tercer astado de Baltasar Ibán en Las Ventas. El espada vació al animal, exprimiéndole a base de entrega, valor y pundonor. Se tiró a matar o morir con la tizona, cobrando una fortÃsima cornada a la altura del tercio medio de su muslo derecho. La hemorragia fue clarÃsima desde el momento del percance, quedando la plaza helada, en un silencio que abrumaba.
Román
Román contará con tres sustituciones de lujo a consecuencia de la baja de Emilio de Justo por lesión. El valenciano estará presente en Nimes, Madrid y Vic-Fezensac, primero este sábado dÃa 8, en Madrid al dÃa siguiente y el 10 en Vic.
En Nimes estará acartelado junto a Antonio Ferrera y Toñete para medirse a un encierro de Jandilla. Al dÃa siguiente, en Madrid, toros de la ganaderÃa de Balatsar Ibán compartiendo plaza junto a Curro DÃaz y Pepe Moral. Por último, y el tercer festejo consecutivo para Román, será en Vic frente a toros de Pedraza de Yeltes junto a Daniel Luque y Juan del Ãlamo.
Román fue corneado con trasteaba con la muleta. El diestro le prendió a la altura del glúteo propinándole una cornada de 6 cm. El parte médico reza lo siguiente:
Abrió la tarde Manuel Escribano que estuvo acertado en banderillas, a destacar el tercer par al quiebro y violÃn. Entraba el de Adolfo sin celo alguno en la muleta del sevillano por lo que dejó muletazos sueltos sin mucho contenido por las cualidades del animal. Mató de entera y fue silenciado. El cuarto fue aplaudido de salida y de nuevo levantó la ovación del respetable en banderillas, tercer par arriesgado pegado a tablas de mucho mérito. Lo citó desde los medios para cambiarle el viaje por la espalda en un intenso comienzo de faena. RespondÃa el de Adolfo en las dos primeras series por el derecho, la tarde se levantaba con las arrancadas del de Adolfo. Al probarlo al natural se mostró más orientado y la faena fue a menos. Valiente Escribano ante las complicaciones con un toro que se desfondaba y lo prendió feamente siendo trasladado por sus compañeros a la enfermerÃa de inmediato. Allà fue operado de una grave cornada de 25 cm.
Román se la jugó ante un segundo que se le colaba desde el minuto uno con peligro. Firmeza sin dar un paso atrás del valenciano que arriesgó y en una de ellas le prendió y levantó del suelo. Tras matar pasó a la enfermerÃa donde fue atendido de una cornada de 5cm en el glúteo. Tras matar al cuarto con Escribano en la enfermerÃa salió el quinto.Faena inteligente de Román, faena a más. Román se la puso como un tÃo y toreó con garra, exigiéndole y con el público entregado. Tandas cortas pero exprimiéndole y se tiró a matar o morir consiguiendo una entera y una oreja de ley.
Roca Rey no pudo hacer nada ante el incómodo y deslucido tercero. Salió el sexto y con la tarde venida arriba salió un gran toro de Adolfo MartÃn. Lo cuidó y le exigió en el momento adecuado para arrancar derechazos largos, profundos en series que iban a más. Al probarlo al natural, parecÃa que no era ese pitón pero con mando y con la muleta por bajo consiguió meterlo en cintura y mandar. El público en pie ante la casta y bravura del astado y el poder en las manos de Roca Rey. La espada no entró a la primera y a la segunda cayó baja. Todo quedó en ovación como resultado pero fue faena de figura y la afición lo supo ver.