Jorge MartÃnez ha vuelto a demostrar cuanto torero tiene dentro de sà mismo. El joven matador de toros tomó la alternativa compartiendo cartel con Roca Rey y Juan Ortega, volviendo a reivindicar su nombre. Salió en volandas en una tarde para el recuerdo.
Una temporada brillante a pesar de los peros, qué son muchos. Sin embargo, pocos son suyos propios, más bien corren a cuenta de un sistema que sigue tratando de taponar la carrera de un joven torero de largo recorrido. A pesar de los triunfos y méritos, pocas plazas se han acordado de llamar para anunciarle en sus carteles.
Ahora, recién alternativado, llega el momento más duro. El habitual parón que sufren muchos al dar el salto de escalafón, siempre es un miedo inquebrantable. Jorge MartÃnez no merece parar, merece nuevos contratos, nuevas citas en las que demostrar que está para mandar en esto… o por lo menos intentarlo.
En AlmerÃa no se amilanó con sus compañeros de cartel, ni siquiera por la fuerte voltereta que sufrió. MartÃnez tiene muy claro el camino y la meta a la que aspira. Una ruta que por el momento atraviesa con espinas, a la espera de llegar a la rosa de la plenitud de la fiesta.