TodavÃa en Castellón alguno debe preguntarse quién es Pablo Aguado. No en la afición, pues el sevillano es bien conocido por quiénes llenaron los tendidos el pasado año para verle, sino por quiénes están en los despachos. Estos últimos, parecen aún no conocer al torero.
Extraña que no le conozcan y, mucho más, que no esté presente en la cartelerÃa de este 2023 en la feria de La Magdalena. El sevillano cuajó una de las obras cúlmen de la temporada, cortando dos orejas de ley y abandonando en volandas el coso castellonense… pero este año ¿Quiés es Pablo Aguado?
El intercambio de cromos y el juego de un sistema que cada vez hace más aguas ha dejado fuera del ciclo de La Magdalena al espada sevillano. A pesar de los contactos de la empresa con el entorno del torero, la categorÃa y la oferta que se ofrecÃan no correspondÃan con el caché del torero en esta plaza y más, después del éxito del pasado año.
Aguado topó con el mejor toro de la tarde de la ganaderÃa de Juan Pedro Domecq, inspirándose y llenándose de torerÃa. Con una faena de menos a más en la que siempre mantuvo la intensidad, el sevillano conquistó a golpe de arte los tendidos de la plaza de toros de Castellón. Dos orejas y una vuelta al ruedo clamorosa que le han servido para caer en el olvido de los empresarios. Raro, raro, pero todos sabemos y conocemos los nombres y apellidos de este desastre… pero la desgracia de algunos es el beneficio de otros y, al final, es la pescadilla que se muerde la cola.