SerafÃn MarÃn regresó ayer a Las Ventas después de ocho años desde su última actuación. Una vuelta que no fue por los derroteros esperados, con un juego pobre en el conjunto de sus lotes.
A pesar de todo, el diestro catalán dejó detalles que recordaron en Madrid que su tauromaquia sigue necesitando de oportunidades. El máximo exponente del toreo en Cataluña enarboló la bandera de la entrega a través de pequeños detalles de buen gusto y trazo.
La tarde no salió según él esperaba, como reconoció en los micrófonos de OneToro TV: «No venÃamos a esto, pero es lo hay. Uno viene buscando el triunfo y salir de donde está dando otra dimensión… pero ha sido imposible. El de Partido de Resina, por lo menos, me ha dejado pegarle algún lance y algún muletazo porque tenÃa clase aunque no tuviera poder alguno, pero el de Peñajara ni eso . Le ha sobrado el tercer puyazo, pero el público lo querÃa ver y ha echado la persiana muy pronto«.