La expectación con Morante de la Puebla de transformó rápidamente en una gran decepción. No tuvo suerte con su primero, una vez más en esta feria, pero la masacre a la que sometió al quinto de la tarde no tiene perdón.
Una secuencia bochornosa que tiene dos grandes culpables: Morante de la Puebla y Pedro Iturralde. El primero por permitir semejante castigo y, el segundo, por administrarlo. Vergonzoso tercio del que el animal salió derrotado, qué no es para menos.
La faena de muleta fue un visto y no visto… y no por la duración, sà no por el contenido. Un animal que no le quedaban no dos pasos y un torero, que no tuvo por dónde cogerlo. Pero fue su culpa, no lo olvidemos. Del uso de los aceros, mejor ni hablar.
La bronca de Madrid se tuvo que escuchar hasta en La Puebla del RÃo. La condición del animal, que no apuntaba maneras, no justifica una masacre asÃ, le pese a quién le pese.
3 comentarios
Yo creo que se cargó a los DOS en varas. Su apatÃa se reflejaba en su rostro.Salió sólo con la idea de cobrar sin dar nada a cambio.Fué vergonzoso. Van a tener que inventar un toro para él y ya nos podemos figurar las cualidades del mismo.
Por favor este señor que NO vuelva más a Madrid!
Un mojón pa ti,la culpa fue del presidente que no lo mando a los corrales. Lávate la boca para hablar de Morante.