Tomás Rufo ha logrado abrir la Puerta del PrÃncipe por segunda vez en su corta carrera como matador de toros, consolidándose asà como uno de los jóvenes con mayor proyección. Lo hizo gracias a un buen lote de toros de Jandilla que le permitieron sacar a relucir las virtudes de su toreo, en especial el temple y la profundidad, que volvieron a conquistar al público sevillano, que le premió con las tres orejas necesarias para descerrojar la puerta de la gloria. Manzanares y Pablo Aguado se fueron de vacÃo en una tarde dominada por Rufo de principio a fin.