Daniel Luque apostó con fuerza en Dax encerrándose con seis toros de la ganaderÃa de La Quinta. Una tarde que llegaba quizás con un punto de reivindicación, en la que el torero sevillano querÃa mostrar su toreo en plenitud.
Lo hizo, la encerrona de Dax pasará a la historia por el extraordinario juego de los toros de La Quinta, dos vueltas al ruedo y un indulto, y por el toreo caro que Luque imprimió. Los premios fueron el justo balance de un conjunto descomunal en el que el espada se mostró en sazón, se reivindicó y puso a todos de acuerdo.
Una tarde que viene a poner de manifiesto que hay que dejar de joder a este torero, darle el lugar que merece en las grandes ferias y dejarse de milongas. Han sido diversos y variados los desprecios que el de Gerena ha tenido que sufrir a lo largo del año, quedándose fuera de importantes ferias o entrando en carteles que no responden a la capacidad mostrada a lo largo del año.
Esperemos, por el bien de la fiesta, que en este final de año se trata al espada acorde a su calidad y no se le siga despreciando en los despachos. Capacidad tiene, sólo faltan las oportunidades y que el toro le respete.
