El Juli vivió ayer una emocionante tarde en La Maestranza. El madrileño se mostró solvente durante la lidia, con faenas de poder, propias de su estilo. A pesar de que en el ruedo no se le vió afectado, en el callejón, sà se le vio dolorido por una voltereta sufrida en el campo hace unos dÃas:  «Estoy fatal con la espalda desde la voltereta en el campo. Estoy trabajando mucho con los fisios y muy motivado».
Con respecto al primer toro de su lote, al que arrancó una oreja comentó:  «He estado a gusto, el toro ha sido bravo y exigente, ha sido un gran animal. Estoy sufriendo mucho, pero hoy he disfrutado el toreo».