Susto de los gordos el que se vivió durante el tercio de varas en el cuarto toro de la tarde en Leganés. En el momento en que la puerta se abrió para que entrase el picador, el animal embistió con dureza el peto, empotrando al caballo con la puerta trasera, la que protege el patio de caballos, que llegó a abrirse ante la presión ejercida por el toro y el picador.
Momentos de mucha tensión y peligro que se solventaron gracias a la rápida intervención de monosabios y profesionales como se puede ver en el vÃdeo.Â
Finalmente todo quedó en un susto y el astado volvió al ruedo tras unos momentos de mucho apuro para todos los actuantes e integrantes del festejo.