Emilio de Justo estuvo cerca de sufrir un gravÃsimo percance en la plaza de toros de Nimes. El espada se encontraba realizando el quite al segundo toro de la tarde, cuando el animal lo arrolló y derribó. Una vez en el suelo, el animal trató de hacer presa, pasando el pitón a escasos centÃmetros del cuello de De Justo.Â
Se vivieron unos instantes dramáticos, en los que el torero tuvo que agarrarse a las astas del animal para evitar males mayores. Rápidamente llegaron las cuadrillas a separar al animal y permitir al torero salir de la delicada situación.Â