«Me retiro. Me retiro de la que hasta ahora ha sido mi vida, de la profesión más bonita que existe, me retiro de la profesión más auténtica que hay y habrá siempre.
Precisamente mi decisión se debe a esto último, después de pensarlo y madurarlo muchos dÃas y noches, he llegado a la conclusión de que no estoy dispuesto a pagar el peaje que han pagado tantos toreros, en especial, como es lógico, mi gran amigo VÃctor Barrio.
A mi parecer, un hombre que no está dispuesto a jugarse la vida, en el sentido literal de la palabra, nunca deberÃa enfundarse un vestido de torear . Lo primero porque eso serÃa engañar a la gente que paga una entrada por verle, serÃa engañar al toro que entrega su vida todas las tardes, y serÃa engañarse a uno mismo.
Por esta razón, he decidido retirarme. Porque he caminado en esta profesión siempre con toda la verdad y por derecho, respetando y amando al toro y a la profesión por encima de todo. Y por ese respeto que me merece el toro, la profesión y el vestido de torear, creo que si no estoy dispuesto a jugarme la vida, no debo volver a vestirme de torero.
Por último, quiero dar las gracias a esta forma de vida que he llevado estos años por todo lo que me ha aportado y por todo lo que me llevo de ella. Y sobretodo daros las gracias a todos los que habéis estado conmigo dÃa a dÃa, los que me habéis acompañado en este maravilloso viaje, y gracias también a los que me lo habéis puesto tan difÃcil en algunas ocasiones, porque conseguisteis sacar lo mejor de mà en la plaza. Pero sobre todo gracias al toro, es el que realmente se merece todo.
Me voy con el privilegio de haber podido pisar las plazas más importantes, con la satisfacción de haber caminado por derecho todo este tiempo. Y me voy con la tranquilidad de respetar por encima de todo al toro, al toreo y a aquellos que aman y respetan esta profesión, ya que ellos están dispuestos a jugarse la vida y enfundarse ese mágico vestido tarde tras tarde.
Gracias por tanto».