Abrió la tarde un toro bien armado, estrecho de sienes pero blando y sin fuerzas. Lo recibió Juan José Padilla a la verónica toreando templado y con oficio. En el tercio de banderillas invitó a sus compañeros de cartel a poner los palos junto a él, muy ovacionados los tres pares. Comenzó la faena de muleta por la mano derecha el jerezano que se encontró un toro parado que le dio pocas opciones. Cumplió el pirata que dejó una buena estocada.
Muy templado con el capote Antonio Ferrera, que fue ganando terreno al animal hasta dejar una vistosa media verónica en los medios. Compartieron de nuevo el tercio de banderillas los tres toreros que dejaron importantes pares. Muy torero el balear que fue sacando al toro a los tercios con cambios de manos al comienzo de la tarde. Complicado el animal que llevó siempre la cara alta lo que complicó la faena. Aún asÃ, dejó detalles de gran valor artÃstico y dio muestras del gran momento de forma en el que está. Muy por encima de su oponente.
Manseó el tercero de la tarde que no tuvo ninguna emoción en el caballo. Se compartió de nuevo el tercio de banderillas entre los tres de oro. Arrancó firme y dispuesto por la mano derecha Manuel Escribano, que dio tiempos al toro entendiéndole y haciéndole humillar. Le costó embestir con clase por el pitón izquierdo, y cuando el diestro volvió sobre la diestra el toro se vino abajo. Estocada siendo silenciado.
Dispuesto y muy torero salió en el segundo de su lote Padilla, que dejó cuatro largas y una larga cordobesa muy bien recibidas en los tendidos. Pareó con compromiso y disposición. Manseó el animal que no siguió los engaños buscando las tablas después de cada tanda. Poco pudo hacer el jerezano que pasaportó al animal de un espadazo.
Se inventó una faena de muleta tremenda Antonio Ferrera. Probó al toro por ambos pitones al animal que no quiso humillar por ninguno de los dos pitones. A partir de aquÃ, faena de compromiso, de genio, toreando muy templado y para el animal, todo para el astado. Lo llevó suave, templado, pudiéndolo, dejando naturales de largo trazo, a compás. Finalizó con unos tremendos trincherazos rubricados con una buena estocada. Oreja y petición de la segunda.
Muy serio el que cerraba la tarde en Madrid, si bien, le faltó embestida y codicia. A la puerta de toriles se marchó Manuel Escribano a recibir al animal, al que toreó a la verónica en los primeros compases de la faena. Dejó un gran tercio de banderillas, levantando al respetable de sus asientos tras el tercer par a la calafia. Comenzó por cambiados por la espalda con el toro pasando muy cerca. Cuajó al animal que fue de menos a más, con dos tandas finales sobre la mano derecha que cuajaron en los tendidos. Mató con un metisaca.
FICHA DEL FESTEJO
Juan José Padilla: Silencio / Ovación
Antonio Ferrera: Silencio / Oreja con petición
Manuel Escribano: Silencio / Ovación
Imagen: Plaza 1