Roca Rey se enzarzó ayer con el Tendido 7 en Las Ventas. Un gesto que muchos han tildado de enemistad eterna con este tendido, pero que merece un análisis profundo y poner los puntos sobre las Ães. No todo ha sido como se ha contado, ni muchos de este tendido han tenido que ver en la bronca.Â
No se puede criminalizar a un tendido de solera como es el 7. El tendido está compuesto por cientos de aficionados y no todos han faltado al peruano. Hay que analizar por partes y ver dónde se sucedieron los enfrentamientos y en qué momentos de la faena.
El efecto Roca Rey ha llevado un público, quizás menos experimentado en los ruedos. Ni todo es blanco, ni todo es negro, pero lo vivido ayer en Las ventas deja clarÃsimo un asunto: Se está perdiendo la afición. Por parte de unos y otros, pero el criterio de Las Ventas está cayendo en picado.
El enfrentamiento entre Roca Rey y el tendido 7, no va a tener el castigo que otros toreros han sufrido por gestos parecidos. Y no va a tener el mismo efecto, porque no todos los grandes aficionados del 7 estuvieron en las trifulcas. Habrá que esperar al regreso del peruano, seguramente en Otoño, para ver qué ambiente se vuelve a vivir en el coso. Ojalá y, por las dos partes, todo transcurra de la manera que merece el rigor y el respeto de Las Ventas.Â