Cristiano Torres arrasa de nuevo esta vez en Gallegos de Argañán. Cuajó una faena de principio a fin destacando sobre todo con una seguridad soberbia en la ejecución de cada muletazo. Este joven aragonés entró al coso salmantino a revienta calderas, y el público lo notó desde el principio. Tras una faena de una soberbia expresión culminó la tarde con una estocada fulminante digna de dos orejas y rabo para un torero con miras de figura.
La tarde que abría la temporada sevillana, vino marcada y condicionada por el papel de las reses de Juan Pedro Domecq. La divisa sevillana ofreció un juego muy pobre, siendo devueltos dos de los animales y sin dar ninguna opción a los toreros.
Morante de la Puebla dejó detalles de torería, con un toreo personal y sentido. Los mejores momentos surgieron frente al segundo sobrero de Virgen María, arrancando la faena con el brazo en las tablas. Marca de la casa. Ovación y silencio.
Juan Ortega lució el capote en ambos toros, rompiendo los olés en el primero de su lote. Con la muleta, no pudo levantar la tarde, dejando detalles sueltos de torería. Ovación y silencio.
Tampoco tuvo suerte en su lote Pablo Aguado. Se topó con dos animales sosos, faltos de fuerza. Esfuerzo serio del sevillano, que dejó los mejores momentos de la tarde en el quite reglamentario de Morante y en la respuesta de Pablo Aguado.
En el apartado ganadero, Juan Pedro Domecq dejó un petardo bárbaro en el coso del Baratillo. Sí bien los animales tuvieron nobleza y clase, la fuerza brilló totalmente por su ausencia. Tarde de decepción en Sevilla y serio toque de atención de la afición al ganadero, pitando todos los animales y con varias broncas a lo largo de la tarde. Para replantearse muchas cosas…
Complicado de comportamiento el primero bis que abrió la tarde en Madrid. Carlos Olsina esbozó una faena de exposición, exprimiendo al animal, sacándole de uno en uno los muletazos. Disposición del torero que tuvo que luchar contra el viento a lo largo de todo el conjunto. Silencio.
Manso resultó el segundo de la tarde, frente al que José Rojo clavó las zapatillas en una labor de personalidad aplastante. Terminó la faena cerrado en tablas por la condición del animal. Con la tizona cobró un terrible percance con el pitón viajando y entre el pecho y el cuello. Fue trasladado a la enfermería, encargándose Carlos Olsina del descabello. Terminaron sonando los tres avisos.
Daniel Barbero se encontró con un soso oponente frente al que poco pudo expresar. Silencio. No anduvo fino de nuevo Carlos Olsina con el descabello que desmereció una labor aseada frente a un novillo desclasado. Escuchó algunos pitos al doblar el animal.
Faena de aplomo de José Rojo ante el quinto de la tarde y en la que escuchó una fuerte ovación tras superar el percance en el primero de su lote. Importante labor del extremeño que se presentó de verdad en Las Ventas, a la altura de la ocasión. Exprimió a su oponente a base de entrega y pundonor. Estocada y dos golpes de descabello. Fuerte ovación.
Daniel Barbero se llevó el mejor novillo de la tarde en el cierraplaza, un encastado animal de Sánchez Herrero. Faena de más a menos del novillero con dos tandas de iniciales de mucho gusto, que despertaron los primeros olés. Estocada y vuelta al ruedo.
FICHA DEL FESTEJO: – Carlos Olsina: Silencio – Algunos pitos – José Rojo: Herido – Ovación. – Daniel Barbero: Silencio – Vuelta al ruedo.
Importante inicio de temporada en Las Ventas con una gran tarde de Víctor Hernández que perdió la oreja en el primero de su lote y cortó dos en segundo de su lote tras una gran actuación. Uceda Vargas aprovechó su paso por la capital para reivindicarse; salto de calidad del espada. Carlos Aranda se topó con el peor lote de la tarde.
Abrió la temporada en Las Ventas un serio novillo de Los Chospes, con cualidades y repetición, pero justo de fuerza. Carlos Aranda esbozó una faena larga, tratando de estirar al máximo las embestidas de su oponentes. Los mejores momentos llegaron en una profunda tanda sobre la zurda. Estocada y palmas. Importante actuación de Víctor Hernández que se presentaba en Madrid. Dulce con el capote, templando, con mucho gusto. Con la muleta esbozó una faena profunda, toreando muy despacio. Rompieron los primeros olés del año al son de su muleta. Importante actuación del madrileño que perdió la oreja por el manejo del acero. Fuerte ovación.
El tercer pasaje de la tarde vino marcado por el escaso juego del novillo, que acusó quizás un mal tercio de varas. Uceda Vargas propuso una actuación valiente, tratando de poner todo lo que el animal no tenía.
El cuarto capítulo de la tarde vino marcado por una sobria actuación de Carlos Aranda, que dejó destellos de su toreo. Silencio.
En torero, como hay que venir a Madrid salió de nuevo Víctor Hernández en el quinto de la tarde. El de Los Santos de la Humosa no se dejó nada en el tintero, cuajando una gran faena. Sobre la diestra toreó con mando, parando la embestida del novillo, con mucha personalidad. Con la izquierda dejó dos tandas de muchos quilates. Una actuación sería y rotunda que le valió, previo espadazo para arrancarle las dos orejas al novillo. Puerta grande y toque de atención del madrileño para esta temporada. Tras la vuelta al ruedo del novillero se desató una tremenda bronca en los tendidos por la segundo oreja concedida a Víctor Hernández: «Fuera del palco» tronó el respetable. Fuerte división de opinión con el segundo trofeo.
Cerró plaza un novillo soso, frente al que Uceda Vargas cuajó una sentida faena de esfuerzo y verdad. Exprimió a su oponente sacando tandas importantes. Espadazo en todo lo alto, que bien pudo valer una oreja. Criterios dispares desde el palco.
FICHA DEL FESTEJO
Carlos Aranda: Palmas – Silencio Víctor Hernández: Ovación – Dos orejas. La segunda con división de opinión. Uceda Vargas: Silencio – Vuelta al ruedo tras petición.
El Niño de Las Monjas ha logrado la primera puerta grande de la Feria Taurina de Fallas 2022 tras cortar este miércoles una oreja a cada uno de su lote de la novillada de El Pilar.
Ambición absoluta del valenciano. Recibió a portagayola al que abría plaza y estuvo variado con el capote. Se sobrepuso al fuerte viento en la faena de muleta y una gran estocada puso en su mano el primer trofeo. Otro espadazo le permitió en el cuarto redondear la tarde, tras un trasteo sólido en el que logró brillantez con la diestra.
Pudo expresarse al natural Álvaro Alarcón con el segundo bis, sobrero de la ganadería titular. Mucho valor mostró en cercanías en el tramo final de su faena y paseó la oreja tras una estocada entera. Reafirmó su buen concepto con el segundo de su lote, pero el palco no atendió la petición y dio una vuelta al ruedo. Menor lucimiento pudo encontrar con sus oponentes Manuel Perera, que paseó otra oreja del sexto, ante el que fue prendido en varias ocasiones y volvió a demostrar su raza y valor.
Gran corrida de toros con el hierro de Pallarés y extraordinaria tarde de la terna con un rejoneo de ensueño. Diego Ventura se alzó como el máximo triunfador al cortar cuatro orejas y un rabo. Por su parte, Leonardo hizo pleno de cuatro orejas. Mientras Sergio Galán que abría cartel cortó tres apéndices en total.
Oreja para Sergio Galán ante el primero. Un Pallarés, con nobleza pero justo de raza. Galán demostró su buen concepto y temple ante un abreplaza que duró poquito y que terminó parándose. Buena labor e inteligente en la que aprovechó las inercias y las querencia para sacar todo lo que llevaba su antagonista. Destacó sobre todo montando “Ojeda”.
Volvió a refrendar su concepto y temple Galán con otro bueno de Pallarés. El cuarto destapó nobleza y son, como a toda hasta aquí. Un rejón de castigo de salida bien ahormado ante uno de buena condición pero justito de fuerzas. Aprovechó SergioGalán las embestidas del toro que siempre quiso más de lo que pudo. Con “Capote” caldeó el guiso del segundo del lote, ante unos tendidos muy metidos muy metidos en su clásico y buen rejoneo. Amagó el Pallarés con echarse antes del rejón de muerte y tras dejar uno arriba paseó el doble apéndice.
A portagayola se fue Diego Ventura para recibir al segundo de la tarde. A la postre, un toro encastado al que Ventura lo amasó de principio a fin. Dos orejones le cortó al transmisor que abrió su lote. Palpitante fue el rejón de salida con el toro en los costillares del jaco. Tremenda exposición y autenticidad. El tercio de banderillas de poder a poder dejando que segundo llegará a escasos centímetros. “Lío” hizo honor a su nombre y formó un “lío”. Todo lo hizo con temple y las banderillas sin metros para salir- fueron gloriosas. La plaza en pie por esos lares de faena que acabó con las cortas. Pinchó arriba y se esfumó el más que merecido rabo quedando todo en dos orejas.
Diego Ventura manifestó en el precioso Coso del Pino su supremacía de figura. Al quinto -segundo de su lote- lo cuajó de forma compacta. Toreó a dos pistas llevando cosido al buen animal. Banderillas nuevamente de poder a poder y reuniendo en todo lo alto. Todo de forma exquisita. Pero la revelación total vino con “Bronce”. Primero con una banderilla de mucho mérito y riesgo, y segundo, con dos pares sin cabezal. Ambas cosas hicieron explotar a la en pie. Su par a dos manos fue para enmarcar. Por entonces la plaza estaba entregadísima a Ventura y le pidió el rabo tras un rejonazo. Cortó las dos orejas y el rabo. Faena de ley y autoridad ante un interesante Pallarés. Dio la vuelta triunfal con el yerno de José Cubero, propietario de la ganadería.
Faena sólida en la que entendió perfectamente a un toro de buen tranco con el que se mostró muy centrado y capaz. Leonardo mostró que vive una madurez absoluta y que está en la sazón de su carrera. Todo lo hizo con suavidad pasmosa, siempre buscando ir de frente y colocando arriba los palos. Al igual que Ventura, puso al Coso del Pino en pie con un sensacional par a dos manos. Finalizó con cortas ante un tercero justamente ovacionado camino del desolladero. Se le pidió el rabo pero el palco lo desestimó. Dos importantes orejas.
El sexto de la tarde fue el animal más desclasado de la corrida, un toro con movilidad pero que nunca acabó de entregarse. Leonardo lo puso todo para que el toro rompiera. Lo hizo todo a favor del toro en una labor de máxima entrega. Un rejoneo medido a las condiciones del sexto al que le llegó mucho y al que tragó embestías fuertes. Muy centrado ante el cuierraplaza volvió a dejar patente pasa por un momento excelso. Su esfuerzo y madurez le valieron las dos orejas.
FICHA DEL FESTEJO:
Sábado, 5 de marzo de 2022
Plaza de toros de El Pino
Sanlúcar de Barrameda (Cádiz)
Inauguración de la temporada.
Festejo de rejones con motivo del nombramiento de la localidad gaditana como «Capital Española de la Gastronomía 2022».
Entrada: Tres cuartos de plaza.
Toros de Pallarés, bien presentados y de gran juego en general.
Obligado Antonio Ferrera a cambiar el toro abre plaza, al partirse el pitón rematando en el burladero. Salió el segundo sobrero al estropearse el primero en corrales. El de Montalvo tuvo mucha nobleza y cualidades, acusando quizás un punto de recorrido. El extremeño marcó una faena propia, de sentimientos; en la que faltó acople para mayor lucimiento. Estocada y ovación.
Descastado resultó el segundo de la tarde, que se fue apagando a lo largo de la lidia, llegando muy flojo a los últimos compases. Miguel Ángel Perera toreó profundo en una cueva faena que terminó alargando en exceso. Estocada defectuosa y descabello.
Gran actuación de Alejandro Marcos, frente a un buen ejemplar de Montalvo. Toreo suave, con las yemas; de poso y reposo. Faena muy inteligente del espada que resultó prendido sin consecuencias al entrar a matar a la altura del pecho. Gran actuación. Oreja.
Extraordinaria lidia en el cuarto de la tarde por parte de la cuadrilla de Antonio Ferrera, que fue fuertemente ovacionada. Por su parte, el extremeño se mostró arrebatado, con una lidia espléndida entre lo extravagante y la locura. Esbozó la faena sobre el pitón derecho y el fallo con los aceros le privó de premio. Fuerte ovación en el arrastre para el animal. Vuelta al ruedo.
Sensacional actuación de Miguel Ángel Perera con el quinto, tapando los defectos del animal e inventándose una faena de alto voltaje. Toreó con mando, cuajando al animal por ambos finales. El final de la faena fue un hervidero, con una larguísima tanda en apenas un metro cuadrado, sin mover los pies. Pinchazo y estocada. Dos orejas.
Buen recibo capotero de Alejandro Marcos con el último de la tarde. Soberbio con la muleta, administrando fantástica la lidia ante un buen toro al que le fallaron las piernas. Los tendidos se rompieron en olés con la diestra y se partieron con la zurda. Exquisita actuación para un torero que apunta muy alto este curso. El mal uso de la tizona dejó todo en una ovación.
FICHA DEL FESTEJO: – Antonio Ferrera: Ovación – Vuelta al ruedo. – Miguel Ángel Perera: Ovación – Dos orejas – Alejandro Marcos: Oreja – Oavción